Una correcta metodología del trabajo puede incrementar la productividad y por ende, los ingresos de una empresa. Hoy desde SBM Sociedades, su empresa de referencia para la venta de sociedades anónimas y limitadas, le contamos qué son las metodologías ágiles y por qué deberíamos implementarlas en nuestra empresa.
METODOLOGÍAS ÁGILES MÁS USADAS
Cuando trabajamos con las metodologías ágiles, no significa que debamos seguir un conjunto de pasos predefinidos ni un proceso determinado. Consiste más bien en un nuevo concepto a la hora de llevar a cabo un proyecto para incrementar su productividad. Es por eso que dentro de este nuevo enfoque de trabajo se han diseñado diferentes metodologías que se adaptan a las características de cada caso.
SCRUM
El Scrum consiste en realizar intervalos periódicos de trabajo, denominados sprints. Cada sprint tiene una duración fija y cuando se finaliza, se hace una entrega parcial con los avances. Esta metodología tiene 4 fases:
- Planificación: En esta fase se establecen los objetivos de cada sprint y los pasos que debemos seguir para alcanzar cada objetivo.
- Ejecución: Se empiezan a desarrollar los objetivos y debemos incluir una breve reunión diaria para examinar el trabajo realizado.
- Revisión: Se presentan los resultados terminados o los prototipos.
- Retrospectiva: Se analiza la ejecución del proyecto, para así detectar posibles fallos y puntos de mejora para el siguiente sprint.
KANBAN
“Kanban” proviene del japonés y significa “tarjeta visual». Esta metodología se denomina así ya que, consiste en el uso de un tablero de control en el que debemos desglosar todas las actividades. Para ello se debe usar un esquema hecho con notas o posits. De esta manera se puede ver el estado del trabajo, así como las tareas que quedan por hacer, las que están en proceso y las terminadas.
Esta metodología consiste en dividir el proyecto en fases pequeñas. De manera que no es necesario alcanzar un plazo definido, sino que el flujo de trabajo debe ser constante, para conseguir mayor rapidez a la hora de detectar y corregir errores.
DESIGN SPRINT
El design sprint permite comprobar la idea de un nuevo producto/servicio en un período de 5 días. Por lo tanto, podemos obtener un mínimo producto/servicio viable y evaluar si es factible de forma acelerada.
Esta metodología consta de 5 fases, una para cada día. Estas Incluyen:
- Estudiar y comprender el problema
- Proponer ideas
- Determinar la solución más acertada
- Crear un prototipo
- Validar su funcionalidad.
Una vez cumplidas las 5 fases, se puede dar inicio a la idea de negocio en un tiempo récord.
VENTAJAS DE LAS METODOLOGÍAS ÁGILES
Las metodologías ágiles son una gran herramienta para la realización de proyectos. Es por ello que cada vez son más las empresas que optan por aplicarlas en sus equipos de trabajo. Algunas de las ventajas que nos ofrecen estas metodologías ágiles son:
- Mayor eficiencia en la gestión del tiempo.
- Transparencia en cuanto al estado del proyecto.
- Aumento en la implicación de las personas del equipo.
- Adaptación constante a los cambios.
- Mayor claridad en el momento de tomar decisiones.
- Optimización del uso del dinero y recursos.
- Identificación temprana de errores.
La implementación de las metodologías ágiles supone una manera dinámica de desarrollar proyectos. En conclusión, permite incrementar la productividad y obtener resultados eficaces con un menor coste y tiempo.
Desde SBM Sociedades, como expertos en la venta y constitución de sociedades, esperamos que este artículo le haya servido para conocer las diferentes metodologías ágiles y así adaptarlas en su negocio para una mayor rentabilidad.
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