Las sociedades mercantiles son entidades jurídicas y empresariales que tienen versatilidad y que pueden fusionarse, transformarse y transferirse de unos propietarios a otros.
En muchas ocasiones, no se inicia un proyecto empresarial desde cero porque es más recomendable comprar una sociedad ya constituida y lista para trabajar con la que se pueda empezar a hacer negocios de forma inmediata.
Por eso, en este artículo vamos a analizar los tipos de sociedades que se pueden constituir en España y en qué consiste su fusión, transformación y transferencia, todo ello respaldado por la Ley que es aplicable en cada caso.
¿Qué son las sociedades mercantiles y cuando elegir esta forma jurídica empresarial?
Las sociedades mercantiles son una forma jurídica en la cual dos o más personas unen sus recursos para desarrollar actividades económicas con fines lucrativos.
Se trata de un tipo de organización que está regulado en España por la Ley de Sociedades de Capital, así como por otras normas de carácter específico según el tipo de sociedad que se quiera crear.
Se caracteriza, entre otras cosas, por tener personalidad jurídica propia, lo que significa que la sociedad es responsable de sus actos y obligaciones por si misma, estando separada de sus socios o propietarios de forma personal.
Las sociedades mercantiles tienen una estructura definida que está formada por un nombre, o denominación social, un domicilio legal registrado, un capital social mínimo según su tipo y un objeto social que describe su propósito comercial. Los tipos más comunes serían los siguientes:
- Sociedad de Responsabilidad Limitada (SL): Ofrece protección patrimonial a los socios, limitando su responsabilidad al capital aportado. Es ideal para pequeñas y medianas empresas gracias a su capacidad de personalización y los bajos requisitos que se necesitan para su constitución.
- Sociedad Anónima (SA): Orientada a empresas más grandes, requiere un capital mínimo más elevado y permite la libre transmisión de acciones. Es la forma jurídica más común en aquellos proyectos que cuentan con múltiples inversores, o que planean cotizar en bolsa.
- Sociedades colectivas o comanditarias: En este caso, los socios tienen un mayor control sobre la gestión, pero asumen también responsabilidades ilimitadas en caso de que se produzcan deudas.
- Cooperativas: Puesto que están enfocadas en los principios de equidad y de participación democrática, suelen utilizarse en todos aquellos sectores que privilegian la colaboración activa de los socios, como el caso del sector primario.
¿Cómo se fusionan las sociedades mercantiles en España?
La fusión de sociedades mercantiles en España constituye un proceso regulado por la Ley de Modificaciones Estructurales, cuyo objetivo es permitir la integración de dos o más empresas en una sola entidad jurídica.
No obstante, dicho procedimiento se ha adaptado recientemente a través de nuevas disposiciones normativas, como el Real Decreto-ley 5/2023, que introdujo varias modificaciones que son aplicables desde este año 2024.
En cualquier caso, la fusión sería la unión de dos o más sociedades a través de la transmisión de sus patrimonios a una nueva entidad, o a una ya existente, disolviéndose las sociedades que transfieren su patrimonio. Dicha fusión, se puede realizar siguiendo varias modalidades:
- Fusión por creación de una nueva sociedad: En la que todas las empresas que participan se extinguen para constituir una nueva.
- Fusión por absorción: La sociedad absorbente integra en su capital social el patrimonio de una o más sociedades que son absorbidas.
- Fusiones especiales: Sería la absorción de sociedades en aquellos casos donde la participación alcanza más del 90 por ciento.
Para que pueda producirse la fusión, se necesita de la elaboración de un proyecto común de fusión, que debe aprobarse por los órganos de administración de las sociedades que están involucradas.
Lógicamente, dicho documento establece los términos y las condiciones de la fusión y con la entrada en vigor del ya mencionado Real Decreto-ley 5/2023, se exige que las empresas involucradas estén al corriente con sus obligaciones fiscales y no tengan deudas con la Seguridad Social.
¿Cómo se lleva a cabo la transformación de una sociedad mercantil?
La transformación de una sociedad mercantil consiste en modificar su forma jurídica sin que ello suponga la disolución de la entidad ni la creación de una nueva.
En esta ocasión, el procedimiento está regulado en España principalmente por la también mencionada Ley 3/2009 sobre Modificaciones Estructurales de las Sociedades Mercantiles, que en este caso también se complementa con el Real Decreto 5/2023.
Para formalizar la transformación, se lleva a cabo la elaboración de un proyecto detallado de transformación, que tiene que ser elaborado por los administradores, o por sus asesores legales.
En dicho documento, se escribe como información las razones del cambio, así como el impacto que tendrá para los socios y los acreedores y las modificaciones que afectarán al funcionamiento de la entidad.
Hay que tener en cuenta que la transformación no altera las participaciones de los socios, salvo que se produzca un consentimiento unánime para que esto suceda.
Por otra parte, si existen obligaciones económicas pendientes, los socios deben regularizar su situación antes de que el cambio sea efectivo y los acreedores conservan sus derechos previos a la transformación.
¿Cómo se realiza la venta y cómo se transmiten las participaciones y las acciones de las sociedades mercantiles?
La transmisión de acciones en una sociedad mercantil se realiza para ajustar la composición accionarial de una empresa, ya sea por motivos estratégicos, sucesión empresarial, o por cambios en la estructura de propiedad del negocio.
El proceso de transmisión se suele iniciar con la negociación entre las partes interesadas, donde se acuerdan los términos de la venta, incluyendo el precio, los derechos asociados a las acciones y las garantías ofrecidas por el vendedor.
La legislación española regula cuidadosamente la transmisión de acciones en la Ley de Sociedades de Capital para proteger tanto a los socios como a los terceros que quieran invertir en la empresa.
Por ejemplo, en la venta de sociedades limitadas, la transmisión está restringida mediante derechos de adquisición preferente para los socios actuales, lo que dificulta la entrada de nuevos accionistas sin el consentimiento previo de las personas que ya forman parte del negocio.
Con toda esta información, esperamos haberte ayudado a entender todos estos conceptos y las Leyes que los regulan, pero si tienes alguna duda, no dudes en contactar con nosotros.